
1.5 Por qué aprender autónomamente en un mundo interconectado.
El surgimiento de nuevos canales de comunicación, el perfeccionamiento y actualización constante de las herramientas tecnológicas de nuestra época, posibilitan que podamos navegar en un mar de conocimiento y tener infinitas posibilidades de encontrar de una manera oportuna lo que buscamos, sin embargo la facilidad de acceder a la información o tener a la mano un dato especifico, un tema particular o cualquier otro tipo de investigación, puede ser limitada o obsoleta, si el estudiante no muestra un interés particular por aprender a percibir, analizar y utilizar ese conocimiento, es decir, sino tiene una motivación o visión clara del propósito que quiere, muy difícilmente podrá alcanzar la capacidad de aprender de manera autónoma y acertada.
El libro Arguelles, D., y Nagles, N. (2010), Estrategias para promover procesos de aprendizaje autónomo (4a edición). Bogotá, Colombia: Universidad EAN p. 92, menciona que “si una persona no desea asumir la responsabilidad que implica aprender por sí mismo, creando sus propias estrategias y buscando los medios necesarios, no hay manera de convertirse en un aprendiz autónomo”, concepto que claramente nos permite evidenciar que en el proceso de aprendizaje autónomo, el estudiante debe poseer ciertas habilidades individuales que le permitirán alcanzar los objetivos planteados, como la responsabilidad, autodirección, reflexión y autorregulación, como evaluación sincera y significativa del avance en la búsqueda del conocimiento.
Por otra parte en un mundo interconectado es importante que el estudiante conozca las herramientas tecnológicas a su alcance y que le permitan utilizarlas correctamente en el proceso de aprendizaje, no obstante esta familiarización debe complementarse con la necesidad individual de alcanzar un propósito definido, emplear todos sus esfuerzos y aplicar de manera eficiente las estrategias que le permitan comprender el verdadero significado de aprender por sí mismo, pero esta dinámica debe cumplir algunas estrategias que orienten su educación, como lo son “aprender a aprender, comprender el proceso de aprendizaje, propiciar el aprendizaje independiente, facilitar el pensamiento flexible” (Klinger, et al, 2000)”, todo este procedimiento aportara al estudiante las herramientas esenciales que garanticen la evolución de su proceso de aprendizaje, así como enfrentar y superar los diferentes retos y dificultades que se puedan presentar.
Para concluir, es importante mencionar, que el aprendizaje autónomo permite alcanzar las metas establecidas, pero en el desarrollo de este proceso, el estudiante debe adoptar y promover algunas estrategias, asi como adquirir habilidades que le conduzcan a aprender y conservar esos conocimientos conquistados.